Una jornada electoral ejemplar culmino ayer Domingo 12 de Marzo de 2006 en Colombia, cuyos resultados marcaran un hito en nuestra historia politica contemporanea.
El primer aspecto que permite hacer esta afirmacion, es la consolidacion definitiva de Alvaro Uribe Velez en lo tocante a su reeleccion, y quiza mucho mas importante, a la gobernabilidad, que quedo blindada gracias al avasallador triunfo de las listas Uribistas de todos los matices en el Congreso Nacional.
En segundo lugar, llama la atencion el desempeño del otrora “Glorioso Partido Liberal”, hoy reducido a un sindicato de caciques en decadencia, y de romanticos soñadores de una izquierda de coctel. El “triunfo”de Serpa es la consolidacion de su derrota, y el segundazo de Rafael Pardo, es precisamente su avance mas importante.
Rivera y Gonzalez, tercero y cuarto finalistas, son solo eso, el tercero y el cuarto. Llamados a recalcular las fuerzas, a replantear los numeros. A dividir por dos lo que hoy esta dividido por cuatro, para asi mandar a Serpa a calificar servicios honrosamente.
Los del Polo tambien dieron un palo. Gaviria saco de taquito a Navarro, en un cuadro similar al liberal. Alli se respira aire fresco, se sienten vientos de renovacion.
Y los Conservadores dieron una sorpresa. Un Partido ciertamente minoritario, pero disciplinado. Cerrado alrededor de sus jefes naturales, y en torno al Presidente, a quien le debe su salida de la Unidad de Cuidados Intensivos.
En un panorama politico como el actual, en la que el Uribismo esta tan enraizado en la mente y el corazon de los colombianos, Rafael Pardo emerge como la opcion de avanzada.
Un retiro oportuno de Serpa le abriria el camino a Pardo para que el Partido Liberal pueda renovarse, y renacer como el Ave Fenix de las cenizas en que lo dejo convertido el horno crematorio del clientelismo, la corruptela y el elefante.
Uribista convencido, sigo siendo Liberal. Y asi como yo, mucha gente apoyaria una eventual candidatura liberal seria y promisoria. Llena de oxigeno y de esperanza, como seria la de Pardo.
Infortunadamente el liberalismo continua en su terco empeño de irse contra Alvaro Uribe a costa de lo que sea. El clasico mazanillismo de marras cerrara filas en torno a Horacio, y con el se hundira en la profundidad de la derrota.
El primer aspecto que permite hacer esta afirmacion, es la consolidacion definitiva de Alvaro Uribe Velez en lo tocante a su reeleccion, y quiza mucho mas importante, a la gobernabilidad, que quedo blindada gracias al avasallador triunfo de las listas Uribistas de todos los matices en el Congreso Nacional.
En segundo lugar, llama la atencion el desempeño del otrora “Glorioso Partido Liberal”, hoy reducido a un sindicato de caciques en decadencia, y de romanticos soñadores de una izquierda de coctel. El “triunfo”de Serpa es la consolidacion de su derrota, y el segundazo de Rafael Pardo, es precisamente su avance mas importante.
Rivera y Gonzalez, tercero y cuarto finalistas, son solo eso, el tercero y el cuarto. Llamados a recalcular las fuerzas, a replantear los numeros. A dividir por dos lo que hoy esta dividido por cuatro, para asi mandar a Serpa a calificar servicios honrosamente.
Los del Polo tambien dieron un palo. Gaviria saco de taquito a Navarro, en un cuadro similar al liberal. Alli se respira aire fresco, se sienten vientos de renovacion.
Y los Conservadores dieron una sorpresa. Un Partido ciertamente minoritario, pero disciplinado. Cerrado alrededor de sus jefes naturales, y en torno al Presidente, a quien le debe su salida de la Unidad de Cuidados Intensivos.
En un panorama politico como el actual, en la que el Uribismo esta tan enraizado en la mente y el corazon de los colombianos, Rafael Pardo emerge como la opcion de avanzada.
Un retiro oportuno de Serpa le abriria el camino a Pardo para que el Partido Liberal pueda renovarse, y renacer como el Ave Fenix de las cenizas en que lo dejo convertido el horno crematorio del clientelismo, la corruptela y el elefante.
Uribista convencido, sigo siendo Liberal. Y asi como yo, mucha gente apoyaria una eventual candidatura liberal seria y promisoria. Llena de oxigeno y de esperanza, como seria la de Pardo.
Infortunadamente el liberalismo continua en su terco empeño de irse contra Alvaro Uribe a costa de lo que sea. El clasico mazanillismo de marras cerrara filas en torno a Horacio, y con el se hundira en la profundidad de la derrota.
Tendremos Uribe para rato. Mientras tanto, tratemos de impulsar una restructuracion de fondo en el Partido Liberal. Una renovacion de fuerzas, de lideres y de programas, que nos permita algun dia la reconquista del poder.
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