Las elecciones en Venezuela

Después de haber visto al troglodita de Chávez escupir rayos y centellas por varias semanas, por fin llego el dia de las elecciones regionales en Venezuela, y por fortuna se cumplieron a cabalidad y en relativa paz.

La oposición, como era esperado, mantuvo el control de sus territorios tradicionales, y gano un estado mas, así como las Alcaldías de Caracas y Maracaibo, mi patria chica, cuya importancia se explica por si sola.

Es, en síntesis, la consolidación de dos cosas: Chávez en el poder, por mayoría, y la oposición en regiones estratégicas, como símbolo inequívoco del resquebrajamiento del régimen. Aunque Chávez dice que en Venezuela no hay régimen sino democracia, y de paso una democracia perfecta.

Acostumbro a ver el programa de Jaime Bayly en Mega TV, el canal de Miami, y confieso que me he vuelto adicto. Bayly es un tipo simpático y medio loco, en el buen sentido de la expresión. Dicharachero y locuaz. Buen escritor y buen entrevistador. A veces discrepo con el tocayo por la forma descarada en que maneja su sexualidad lo que para mi debería ser algo muy intimo, pues soy partidario de la libre orientación sexual tanto como lo he sido del libre albedrío. Pero por lo interesante, Jaime Bayly se ha convertido en fuente obligatoria de consulta para mí

La forma en que sigue a Chávez es tan completa como didáctica. Ya no necesito leer los periódicos de Venezuela, bueno, los pocos que quedan, y entre esos pocos son aun mas pocos los que pueden darse el lujo de opinar de manera diferente al régimen, o democracia como llaman los chavistas. Con Bayly me basta y me sobra.

Si bien causa indigestión cada ocurrencia de Chávez, cada salida o cada metida de patas, ya se en lo interno o en lo internacional, uno como que se ha ido acostumbrando al sainete.

Aun así no deja de asombrarnos oír al chafarote amenazando con mandarle “las tanquetas blindadas” a los candidatos de la oposición. O venirse lanza en ristre contra Patricia Janiot, cuya trayectoria brilla con luz propia, o atropellar la lengua de Shakespeare sin misericordia alguna, poniéndose una vez más de monigote, quien ostenta la primera magistratura en la Patria del Libertador.

Por lo pronto la mayoría sigue de su parte, aunque los estados y ciudades que gano la oposición son de tal importancia, que sin duda afectaran la hegemonía, y esto es una esperanza de que las cosas hallan comenzado a cambiar en Venezuela.